El 4G, modelo de red utilizado actualmente, muestra que la implementación de redes 5G tiene el potencial de resolver problemas de congestión presentes en las redes móviles actualmente, como muestra un informe de Opensignal, que analizó 77 países de todos los continentes. Este informe indica que hay una dificultad para entregar una experiencia de conectividad consistente a los usuarios de las redes 4G en todo el mundo. Por ejemplo, algunos datos muestran que el 42% de los países tuvieron algún tipo de variación de velocidad en la conexión 4G al menos dos veces o más al día, principalmente cuando hay una demanda mayor en la red en horarios pico por la actividad de los usuarios. Como indica el informe, la adopción de nuevas tecnologías como automóviles autónomos y realidad aumentada, dependen de una red móvil con mayor capacidad y consistencia.
Las pruebas de conexión 5G están bastante avanzadas y hay operadores que planean su implementación este año, en ciudades de Estados Unidos, Europa y Asia. Por el momento, los fabricantes de las tecnologías para la arquitectura de las redes 5G, así como los fabricantes de dispositivos móviles, están presionando para tener el soporte necesario para la próxima generación de red - ya que nadie quiere quedarse fuera de esa onda.
En América Latina en general y, especialmente, en Brasil, que es un territorio de dimensiones continentales, es posible que esos lanzamientos no ocurran a corto plazo, posiblemente estará llegando al país después de 2020. Todavía estamos en un momento anterior, en que la red 4G sigue siendo mejorada debido a su cobertura aún limitada en algunos lugares más distantes o incluso en grandes ciudades. Además, para el soporte a las nuevas capacidades a ser transportadas con el acceso 5G, existe la necesidad de realizar inversiones en infraestructura para la conexión de la red por medio terrestre.
En este momento, las empresas todavía están haciendo valer la inversión que hicieron en el momento de la implementación del 4G, a través del uso de toda esa infraestructura instalada por algunos años más. Para instalar el 5G, las empresas necesitarán una nueva estructura de hardware y software, diferente de la utilizada para la cuarta generación, lo que requerirá una gran inversión.
En Brasil, existe otro punto, que es la importante discusión de reglamentación de frecuencias, por Anatel, para la quinta generación. La agencia reguladora prepara un plan para la liberación de nuevas bandas de frecuencias para que los operadores de telefonía móvil y satélite puedan utilizar el 5G de forma eficiente en el futuro. Sin embargo, los detalles no están definidos.
El balance que hago de la situación es que, aunque es una tendencia importante en el área de conectividad, el 5G todavía está en una fase inicial de evaluación y planificación en Brasil e, incluso con las pruebas internacionales bastante avanzadas, difícilmente tendremos acceso a la tecnología en el país antes de 2021. El proceso de transición será lento, las redes van a coexistir y será una migración natural de una a otra en un proceso a largo plazo.
Mientras tanto, necesitamos seguir explorando al máximo la red móvil que tenemos instalada en nuestro territorio con la conectividad 4G existente, además de la conectividad por medio de fibra óptica que ha crecido con la multiplicación de las pequeñas operadoras de internet en el país.
Publicado originalmente en Meio&Mensagem
Con casi 20 años en Orange Business, Felipe Stutz es director de soluciones para Latinoamérica, administrando y desarrollando toda la cartera de soluciones de la empresa en la región. A lo largo de los años, Felipe ha ocupado varios puestos en desarrollo comercial, pre-ventas y operaciones y ha estado activo en actividades de ventas centradas en la innovación y la creación de valor para clientes y en el desarrollo de estrategias comerciales y de soluciones.